El secretario general de la Asociación del Personal Legislativo (APL), Norberto Di Próspero, celebró con trabajadores y militantes el 160 aniversario de la Biblioteca del Congreso de la Nación y sostuvo que si “sigue en pie”, pese a los embates que en los últimos años la pusieron en jaque ante la opinión pública, “no fue por arte de magia sino porque estamos juntos” para defender al Poder Legislativo, que es “la columna vertebral de la democracia”, subrayó.
En un acto organizado por el cuerpo de delegados en el auditorio “Leonardo Favio” de la BCN, Di Próspero les agradeció “de corazón” a los trabajadores que colmaron el salón “la pertenencia que tienen con su lugar de trabajo. Estamos orgullos de ser trabajadores legislativos”.
El líder de APL remarcó que “tenemos que estar todos juntos, más allá del tema político, más allá de las gestiones, más allá de quien sea el presidente. Nosotros, los trabajadores, si no estamos juntos, si no estamos unidos, si el objetivo no es defender nuestro derecho más allá de las diferencias que podemos tener desde el punto de vista político, porque todos comemos de la misma olla, no la vamos a pasar bien”.
Además, Di Próspero exhortó a los legislativos a “tener en cuenta algo: cuando nosotros hacemos un análisis general de cómo estamos, no lo hagamos solamente mirando el ámbito en que nos movemos, mirando la Biblioteca o el Congreso, hagámoslo mirando la realidad del país” que, apuntó, tiene “un 40 por ciento de pobreza. Hay una realidad que es objetiva y hay que reconocerla”.
Respecto a la situación política que atraviesa el país a raíz del resultado de las PASO del 11 de agosto, que dieron un duro golpe a la propuesta de reelección del actual gobierno, Di Próspero resaltó que “hay que aceptar lo que la gente decida. Hay que llegar a octubre, hay que llegar a diciembre”, para que asuma el presidente que resulte electo el 27 de octubre.
En ese marco, convocó a todos a trabajar “para que la sociedad respete al Poder Legislativo como institución, porque es la columna vertebral que tiene la democracia y los trabajadores legislativos, en su totalidad, somos la memoria que tiene el Congreso de la Nación. Los legisladores, diputados y senadores, pasan pero nosotros quedamos, nosotros somos la garantía de que esta institución funcione».